Los marcos son el recurso más utilizado a la hora de decorar y »dar vida» a una pared. Y no es de extraña, porque lo cierto es que dan mucho juego. Sin embargo, habitualmente tendemos a apostar por colocar o distribuir los cuadros y marcos que decoran nuestras paredes de las formas más tradicionales: formando una línea, formando algún cuadrado o rectángulo, recurriendo a la simetría, etc. Hoy, te queremos proponer una idea diferente, muy fácil de aplicar, pero diferente…
Lo que necesitas son marcos, todos los marcos que quieras colocar en la pared, independientemente de su estilo, color o forma. También necesitarás un gran marco que abarque todo el espacio de pared que quieres decorar con y papel tapiz o estampado que encaje con el resto de la decoración.
La idea, como puedes ver en la imagen, consiste simplemente en introducir todos los pequeños cuadros en un gran marco que cuenta como fondo con un bonito y delicado papel estampado.
De esta manera, además de decorar la pared, de otorgarle vida y dinamismo, se crea un detalle diferente, un detalles que supone un atractivo visual que da un giro a la decoración y le otorga personalidad, carácter, estilo, diseño y originalidad.
¿Qué te parece la idea?, ¿te atreves a introducirla en tu decoración?