Cabeceros, hay de todos los estilos, de todos los tamaños, en todos los colores, fabricados en todos lo materiales y para todos los gustos…
En habitaciones en las que el espacio es más bien reducido, una muy buena opción es apostar por un cabecero que además de bonito sea práctico, funcional y cómodo.
Por lo general, en estancias o habitaciones pequeñas, el espacio de almacenaje suele ser un problema, ya que suele ser más bien escaso. Es por ello que, en ocasiones es necesario recurrir a soluciones decorativas prácticas, como la que te quiero mostrar a continuación: Cabeceros, hay de todos los estilos, de todos los tamaños, en todos los colores, fabricados en todos lo materiales y para todos los gustos…
En habitaciones en las que el espacio es más bien reducido, una muy buena opción es apostar por un cabecero que además de bonito sea práctico, funcional y cómodo. Por lo general, en estancias o habitaciones pequeñas, el espacio de almacenaje suele ser un problema, ya que suele ser más bien escaso. Es por ello que, en ocasiones es necesario recurrir a soluciones decorativas prácticas, como la que te quiero mostrar a continuación:
Se trata precisamente de una pequeña habitación en la que ha sido prácticamente imprescindible crear un espacio de almacenaje extra. Y, lo cierto es que apostando por una estantería a modo de
cabecero no sólo se ha conseguido contar con el espacio de almacenaje necesario, sino que además se ha logrado una decoración diferente, original y con mucho estilo.
Poner en práctica esta idea es realmente sencillo. De hecho, lo único que hay que hacer es colocar una repisa o estantería detrás de la cama, a modo de cabecero.
Y si el orden no es tu fuerte y piensas que sería complicado mantener la repisa ordenada, apuesta por decorarla con cestas o cajas que oculten los objetos. Incluso, puedes optar por repisas con
puertas o gavetas.