Si hay un color por excelencia que despierta odios y rechazos ese es el color amarillo, por eso de que los supersticiosos lo atribuyen a la mala suerte. Pero si tú no eres supersticioso/a, el color amarillo puede ser una buena opción a la hora de decorar tu hogar.
El color amarillo es un color alegre y vibrante y tiene tanta fuerza que es capaz de llenar de luz cualquier espacio o estancia. Sin embargo, nada en exceso es bueno… En este caso tampoco, ya que abusar del color amarillo en la decoración puede dar como resultado espacios demasiado agobiantes. Es por ello que decorar con amarillo: ¡Sí! Pero aplicándolo en su justa medida.
A la hora de combinarlo con otros colores, el amarillo ofrece infinidad de posibilidades…
El amarillo combinado con blanco o tonos tierra da como resultado una decoración delicada y elegante. Jugar con la combinación de tonos y colores más alegres como verdes, azules, violetas, etc. con el color amarillo, da como resultado decoraciones más informales, con un toque actual y mucha personalidad.
Sea cual sea tu elección a la hora de combinarlo, el color amarillo puede ser perfecto para decorar cualquier espacio o ambiente, ya sea introduciéndolo de forma notoria o mediante pequeños detalles.