Seguro que ya has escuchado en algún lugar, la palabra Hygge. Este término, es una palabra danesa sin una traducción literal. Pero se podría decir que se refiere a la actitud de dar valor y disfrutar de las pequeñas cosas. Es un estilo de vida.
Para los daneses ser hygge, se trata de una sensación hermosa, una manera de vivir y que debería expandirse a todo el mundo. Para que lo entiendas de una manera más explícita, ¿Recuerdas esas fotos de familias en un sofá, con unos chocolates calientes y abrazados por el calor de una chimenea, mientras leen un libro?
Pues, aunque es un gran plan para el invierno, esta actitud no tiene que ver con la temperatura que hace fuera. Se puede llevar acabo en cualquier época del año.
Seguro que tú también disfrutas de pequeñas cosas que te hacer estar feliz en tu día a día. ¿Sabes que es lo que te hace estar hygge?
Ser Hygge
Ser hygge es una actitud. Un estado de ánimo que te hace estar bien con todo lo que te rodea. Un paseo por la playa, la risa de tu pareja o tus hijos, picar algo con tu familia, un buen libro…. Son ocasiones a la que, sin darte cuenta, a veces puedes restarle el valor que tienen. Y ¿Acaso hay algo más valioso que todos esos momentos y pequeños detalles que te rodean?
Para cada persona, el hygge puede conseguirse de diferentes maneras: disfrutando de la compañía de los demás, encontrando un momento de relax contigo mismo, haciendo aquello que te apasiona, disfrutando de lo que a otros les apasiona y disfrutando el momento. Hay muchas formas de alcanzar ese estado de ánimo.
Analiza tus prioridades y busca que es lo que te hace feliz en tu día a día. Es una buena forma de decorar nuestra alma y seguro que nuestra cara con esa sonrisa que llevaremos colgada día a día.