Ya queda poco para que lleguen los largos días de sol; esos que muchas veces nos gusta disfrutar hasta la noche en la terraza o el jardín.
En esos días, ya sea solos o disfrutando de la compañía de familiares y/o amigos, cuando cae el sol es ideal una delicada iluminación que cree un espacio aún más cálido y acogedor.
Hoy, te mostramos cómo conseguirla, de una forma sencilla y respetuosa para el medio ambiente…
Lo único que necesitarás son unos botes de cristal reciclados, alambre, algunas cintas de colores (en los colores que más te gusten o que mejor encajen con el resto de la decoración) y velas.
Lo primero que tienes que hacer es colocar un alambre alrededor de cada uno de los botes, de manera que quede sujeto y le puedas dejar una especie de asa que luego te permitirá colgarlo. Luego decora cada uno de los botes de cristal con las cintas de colores, envuelve el borde y haz un bonito lazo que aporte delicadeza a lo que será un improvisado candelabro. Una vez que los botes estén perfectamente decorados, lo único que queda es introducir una pequeña vela en cada uno colocarlos estratégicamente en tu terraza o jardín para que creen un ambiente especial cuando enciendas las velas.
Una idea sencilla, económica y que ofrece un resultado encantador, ¿te animas a ponerla en práctica?
