Ideas para decorar

5 tips para deshacerte de lo que no necesitas

deshazte de lo que no necesitas en el hogar

Tendemos a comprar, llevar y almacenar en nuestras casas innumerables objetos que resultan, la inmensa mayoría, innecesarios. Llenan armarios, estanterías, todo tipo de muebles y rincones… y, al final, solo sirven para hacernos creer y sentir que es misión imposible tener la casa limpia y ordenada siempre.

El 2015 prepara su despedida y el 2016 está deseando darnos la bienvenida. Ahora es el momento perfecto para deshacernos de una vez por todas de todo eso que solo ocupa espacio, de lo que realmente no necesitamos. ¡Hagamos hueco para lo nuevo!

Te damos 10 consejos para deshacerte de todo lo que no necesitas y empezar el nuevo año en un hogar y ambiente renovado:

1. Evita llevar a casa todo aquello que no necesites

No se trata solo de sustituir lo viejo por lo nuevo en aquellos casos en los que es necesario, sino también en reducir la cantidad de objetos que guardas y almacenas. Para ello, compra menos…

2. Tira aquello que no te duele desechar

Para empezar, es mejor hacerlo por aquellos objetos a los que no tienes ningún apego, por cosas de las que no te duele deshacerte. Comenzar por cosas que no significan nada para ti, experimentar el proceso, te ayudará a tomar decisiones sobre las cosas que hay que tirar.

3. Establece un plan

Es posible que no encuentres por donde o cómo empezar. Entonces, es necesario establecer un plan…

Revisa todas tus cosas por habitaciones o estancias y, si tirar te cuesta, piensa en todo aquello que ya no utilizas o no te sirve y que otras personas podrían utilizar y sacarle partido. Entonces, regla, dona, vende… todo lo que no vas a volver a utilizar y te está robando espacio.

4. No tengas miedo de dejar ir

La sinceridad contigo mismo/a es fundamental para que este proceso tenga éxito. Debes responder(te) con sinceridad a esta pregunta ¿lo necesito o no?
Los objetos que hay en tu casa deben estar porque te gustan, porque te sirven para algo (contribuyen a tu comodidad o bienestar, por ejemplo) o porque te hacen feliz.

Pongamos un ejemplo: Si vives en un pequeño apartamento en el que no es posible organizar cenas o reuniones multitudinarias, por ejemplo, ¿para qué quieres una vajilla de 12 comensales?

5. No malgastes tu vida en el «materialismo»

A veces no caemos en la cuenta e que cada cosa, cada objeto, cada capricho que tenemos y almacenamos en casa es un ladrón de nuestro tiempo. Invertimos tiempo en elegirlo, en comprarlo, en llevarlo a casa, en limpiarlo, en su mantenimiento…
Sé práctico/a, piensa en el tiempo que debes invertir (no solo el dinero) y lo que te va a aportar, ponlo en una balanza y luego decide.

Estos consejos son válidos de manera personal, pero si vives con alguien (pareja, hijos…), no lo apliques a los objetos de otros. Cada persona tiene derecho a decidir lo que quiere conservar y lo que está dispuesto a desechar. Antes de deshacerte de cosas de otras personas, pregúntales, comenten los pros y contras, valoren en conjunto…

Es posible que al principio te parezca una tarea difícil. Sin embargo, una vez que te pongas manos a la obra y compruebes lo útil y práctico que resulta, este será un ejercicio adoptarás este ejercicio como parte de tu estilo de vida.

Suelta. Deja ir. Amplía el espacio. Renueva… Todo un nuevo año te espera con infinidad de sorpresas, momentos mágicos y oportunidades. Invierte tu tiempo en tus sueños en lugar de regalárselo a los objetos. Y disfruta.

¡FELIZ AÑO NUEVO!